Más de 12 mil personas participaron de la fiesta hípica pedrense que registró un record de apuestas de 5 millones 600 mil pesos. Jardim di Napoli fue el gran ganador de la jornada.

Con éste Clásico como atractivo principal, el Hipódromo Las Piedras celebró el pasado lunes 18 el tercer aniversario de su reapertura en una fiesta que albergó a toda la familia. Se corrieron 12 carreras donde se destacaron, además, los Clásicos: Gran Premio Ubaldo Seré, en el que se consagró El Baluarte, conducido por Héctor J. Guedes, entrenado por Jonhatan Álvarez y defendiendo al Stud El Temporal. El Gran Premio Reapertura, quedándose con la victoria Thoor, el pupilo de César Martín y representante del Stud 3 Amigos que contó con la monta de Cristian Medina y el Gran Premio OSAF donde Everton Rodrigues, luciendo los colores del Stud Demorón,  llevó a la victoria a la entrenada por Ivo Pereira, Vitalita. 

Durante la jornada, el Director General de Casinos, Javier Cha, junto a la Intendente de Canelones, Gabriela Garrido, el Intendente electo Yamandú Orsi, y el nuevo Gerente General de HRU Gabriel Gurméndez, inauguraron 14 nuevos bóxes de espera, que logran una importante mejora  en la dinámica interna de los equinos previo a la carrera. La actuaciones de El Gucci, Marito Silvia y el grupo Vi-Em captaron la atención de grandes y chicos que disfrutaron de la gran jornada. 

Un lugar de puertas abiertas  

Desde su reinauguración, el Hipódromo Las Piedras se consolidó como un verdadero centro de puertas abiertas a la comunidad, con un importante circuito recreativo y social. En sus instalaciones alberga una policlínica a cargo de ASSE, un centro CAIF, el Centro Cultural Julio Sosa y un espacio recreativo con parrilleros y aparatos para realizar actividad física. Además, se edificó una moderna villa hípica, que aloja 250 equinos y que genera decenas de puestos de trabajo, y se dedicó un espacio para la profesionalización del turf.  En un área especialmente acondicionada, se desarrolla un FPB hípico y el curso Auxiliar de Caballeriza, ambos a cargo de la UTU, así como la Escuela de Jockeys y Vareadores que el año pasado graduó a la primera generación de alumnos que hoy ya corre en las pistas.